El director del Instituto Nacional Penitenciario (INP), Ramiro Muñoz, anunció que Gilbert Reyes, ciudadano estadounidense acusado del asesinato de tres mujeres en Roatán en enero pasado, será recluido en la Penitenciaría Nacional de Támara cuando sea extraditado a Honduras.
Muñoz especificó que Reyes será colocado en una celda individual para evitar conflictos con otros reclusos. “No debería compartir celda con nadie, no necesitamos un módulo, lo que ocupamos es una celda, donde él esté ahí y que no tenga problemas con nadie”, declaró el director del INP.
Reyes, al igual que cualquier otro privado de libertad, recibirá las garantías necesarias para salvaguardar su vida, aunque no contará con comodidades especiales.
“Que no espere que tendrá una celda con comodidades, va a tener una celda normal, igual que cualquier otro preso”, enfatizó Muñoz.
El coronel también mencionó que el sistema penitenciario de Honduras alberga a reclusos de varias nacionalidades y no ve ninguna diferencia significativa con la llegada de Reyes. “La celda ahí está lista para cuando lo traigan, directamente a Támara”, aseguró.
Muñoz, quien también es jefe de la Policía Militar del Orden Público (PMOP), destacó que el sistema penitenciario hondureño ha experimentado mejoras significativas.
“El sistema penitenciario hondureño ha cambiado mucho y se va por buen camino”, indicó. Añadió que no hay preocupación por la reclusión de un ciudadano estadounidense en Honduras, comparándola con la situación de hondureños encarcelados en Estados Unidos.
Finalmente, Muñoz aclaró que la custodia de los centros de internamiento para menores infractores no recae en el instituto castrense, sino en otras fuerzas de seguridad, y que, aunque no buscan asumir ese control, lo harían si la presidenta Xiomara Castro lo ordena.