RECORDANDO A MENOTTI

OM/6 de May de 2024/11:35 a.m.

 

*** Quiero dejar a un lado la política, la economía, la frontera y la política exterior para dedicarle esta columna a una persona que conocí después que él ganó como entrenador la primera copa de Argentina en el Mundial de 1978.

Un año después en 1979 jugando en el estadio de River, fui invitado por Menotti a ver el partido en el que Argentina jugó contra Bulgaria y me había presentado antes a los seleccionados campeones mundiales y allí estaba en ese partido Diego Maradona.

Años después lo volví a ver en Buenos Aires y me hizo el honor de obsequiarme un libro escrito por él bajo el título de Fútbol sin Trampa.

Me firmó el libro el 22 de abril de 1986 en Buenos Aires que enriquece mi biblioteca.

Mi más sentido pésame a su familia, a todos los jugadores que lo tuvieron como director técnico y a todos sus compañeros en los equipos que militó como jugador.

Menotti fue uno de los grandes, no solo del fútbol argentino, sino del fútbol global.

Que Dios lo cuide y que siga jugando fútbol en el cielo.

                                                ¿QUIÉN FUE EL “FLACO” MENOTTI ?

Fue uno de los hombres más importantes en la historia del fútbol argentino.

Menotti, artífice como DT de la primera estrella de la Selección en el Mundial 1978, falleció el pasado domingo 5 de mayo a los 85 años.

Si bien tuvo una buena carrera como futbolista, principalmente en el Rosario Central de sus amores y con breves pasos por Racing, Boca y el Santos de Pelé, el “Flaco” alcanzó su esplendor como entrenador.

No solo por los logros, sino por haber dejado una escuela a seguir que perdura en el tiempo con cientos de discípulos:

Menotti arrancó su periplo en los bancos de suplentes con un breve paso por Newell’s, pero fue el vistoso Huracán campeón de 1973 lo que lo catapultó a una Selección que venía de papelón en papelón. Supo enderezar el barco, con su estilo, para conquistar el mundo desde casa, en el ’78.

Al año siguiente, con un Diego Armando Maradona brillante (al que debió dejar afuera de la Mayor), también lo logró a nivel juvenil en Japón.

Después de la dura eliminación del Mundial ’82, dejó el cargo y se fue a dirigir al Diez en Barcelona, donde ganó tres títulos.

También allí empezó a forjarse el interminable duelo con Carlos Salvador Bilardo, su sucesor en la Albiceleste y líder de un pensamiento completamente antagónico, que dividió las aguas del fútbol argentino a fines del Siglo XX.

Menotti también dirigió a Boca en dos períodos, tuvo tres pasos por Independiente (más uno como mánager) y trabajó en el Atlético de Madrid, River, Peñarol, Rosario Central, la Sampdoria y dos mexicanos -Puebla y Tecos-, hasta su retiro en 2007.

Siempre una voz autorizada, en los últimos tiempos se dedicó a ser un hombre de decisión y consulta permanente en la gestión de las selecciones nacionales.

Fue clave para sostener con paciencia el proceso comandado por Lionel Scaloni en la Mayor, que sin experiencia previa pasó de interino a campeón de América y el mundo

El libro escrito por Menotti que le fue obsequiado a Jacobo Goldstein con su respectivo mensaje.