Por: Mario E. Fumero
En un libro que escribí titulado “Hacia un futuro decepcionante” me dediqué a analizar la vida de todos aquellos presidentes o líderes de izquierda que existen o existieron en América Latina y el mundo. Después de un profundo análisis, descubrí que sus ideas socialistas, de tendencias izquierdistas, no se ajustaban a la realidad de su vida capitalista, pues la gran mayoría de esos presidentes de izquierda, que critican el capitalismo, se hicieron millonarios en la política, y sólo hubo uno que pasó la prueba, el cual tiene toda mi admiración, es el expresidente de Uruguay Pepe Mujica.
Este humilde hombre, sencillo, campechano y que ama el campo y el trabajo, aun cuando ostentaba la presidencia de la nación uruguaya, siguió después de dejar la presidencia viviendo como era antes, en su finca trabajando la tierra, y siguió siendo un hombre humilde y coherente con su ideología. Es por ello por lo que lo catalogo, por su estilo de vida y su filosofía izquierdista, como un idealista de izquierda que es coherente en sus creencias con su estilo de vida.
Recientemente he escuchado la noticia que el expresidente Pepe Mujica se encuentra delicado de salud, y a sus 88 años presenta un tumor maligno en el estómago, y por sus enfermedades de fondo no le pueden aplicar el tratamiento de la quimioterapia, ni lo pueden operar, y de una manera valiente y tranquila dio conocer su situación con su mensaje impregnado siempre de su filosófico, la cual contiene un alto contenido moral, siendo digno de admiración.
La cualidad más hermosa de una persona es que su estilo de vida sea coherente entre lo que dice creer, y lo que vive en la vida práctica, algo que hoy día es difícil de encontrar aún en muchos que dicen ser cristianos, porque aquellos que hablan de justicia social y solidaridad, y combaten el capitalismo y la explotación del hombre por el hombre, terminan haciéndose ricos a costilla de la política, contradiciendo su ideología con sus hechos, pues con sus acciones se desmarcan de sus creencias.
Entre los presidentes de izquierda que han gobernado y gobierna América Latina sólo hay dos que han sido coherente en su vida y en sus discursos de izquierda, y como dije al principio de este artículo, Pepe Mujica es el único que vive lo que cree, aunque en segundo lugar tenemos al presidente de Chile Gabriel Boric Font que aunque tiene un discurso de izquierda, no es extremista, y tuvo el valor de condenar las dictaduras de otros líderes de izquierda, como es el caso del presidente de Venezuela.
Lo importante en la vida no es lo que creemos, ni lo que pensamos, sino aquello que vivimos. Debemos transformar en hechos nuestras ideas, y poder ser coherente y transparentes entre lo que digo y lo que hago, y esto es aplicable no sólo en la política, sino también en todos los aspectos de la vida diaria.
Tengamos cuidado, no vaya a ocurrir que nuestras vidas puedan hacer tanto escándalo con nuestros hechos, que la gente no pueda escuchar el mensaje que tratamos de transmitir. Aprendamos la enseñanza del apóstol Pablo cuando en una de sus epístolas afirmó que somos cartas escritas no con tinta, sino con el espíritu del Dios vivo, porque, al fin y al cabo, el poder de la palabra depende de nuestro estilo de vida diario.
