JUANA LÓPEZ RODRÍGUEZ (JUANITA) PIONERA DE LA CAFICULTURA EN EL PARAÍSO.

Autor: Luis Alonso Gómez Oyuela
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EL PARAÍSO, El Paraíso. “Visión es el puente entre el presente y el futuro. Sin ella morimos o nos desenfrenamos. La visión da propósito al dolor. Aquellos sin visión pasan sus vidas tomando el camino de menor resistencia mientras tratan de evadir la incomodidad. Quita la visión a un líder y arrancas su corazón”.

Estas características son parte de la esencia de Juana López Rodríguez (Juanita), pionera de la caficultura en el departamento de El Paraíso, un mérito propio del esfuerzo y dedicación constante en el trabajo. Le gusta identificarse como maestra y caficultora, “porque mi paso por las aulas en varias escuelas, entre otras; la emblemática escuela Francisco Morazán, me mostraron el largo camino de la vida. Maestra y productora de café, ambas cosas son parte fundamental de mi vida; 30 años en el magisterio y el resto de mi vida dedicada a la caficultura”.

“La muerte de Godofredo Zelaya, mi esposo, marco mi vida para siempre aquel fatídico año de 1980, con cuatro hijos de pan en mano fue la gran prueba de fuego, pero también fue el momento de fijarme metas entre aquel presente complejo y el futuro incierto. Pensé que el sueldo de maestra no era suficiente para sobrevivir con decoro y dignidad y, dar el ejemplo a mis hijos”.

En los momentos más difíciles descubrí que el dolor da propósito a la vida y comencé a cruzar el puente entre aquel presente y el porvenir. ¿Cómo empezar a cruzar ese puente? Bueno, aquí nace la que hoy conocen como “La Patrona”, no por mi don de mando sino por el cariño de la gente y la cultura de respeto hacia la educadora y después a la mujer emprendedora, dando los primeros pasos vendiendo caramelos, pan con mantequilla, rodajas de piña y bananos en la escuela. Este fue un pequeño salto, de lo pequeño a lo grande como productora de café.

¿Dicen que la visión es ver más allá de la resistencia? “La finca, 10 manzanas de mi esposo Godofredo, no era mucho, ademas, mal atendida, pero alli encontré la fuerza con la bendición de Dios para convertirme en la primera mujer productora de café en este departamento. Actualmente son 780 manzanas, pero este año no están cultivadas por la situación que enfrenta el sector cafetalero, debido al elevado coste de los insumos y los préstamos con la banca nacional.

Se habla mucho de “resistencia”, pero los que hemos estado en resistencia desde siempre somos los caficultores. Claro, no ha sido fácil superar las crisis que hemos vivido como productores de café. No existe la ayuda gubernamental, no hay incentivos, pero existen muchos parásitos que viven cómodamente a costa del trabajo de miles de productores”.

¿El arranque es lo más difícil? “Así fue: los gobiernos hacen alarde con el trabajo de los productores de café, pero hasta hoy, no hay políticas de Estado definidas en beneficio de los que generamos las divisas que fortalecen la economía del país. Somos nosotros los que adquirimos deudas con los bancos con intereses elevados. La caficultura nacional está llena de parásitos, organizaciones, cuyos dirigentes viajan por el mundo con el dinero de los productores. Yo, he marchado con mi familia derribando los muros de la incomprensión y la indiferencia gubernamental.

“No soy política, soy productora de café, emprendedora, ligada con la gente que trabaja a mi lado. Hago un llamado al gobierno para que pongan sus ojos en el trabajo que realizamos miles de mujeres en la producción e industrialización del café. El único gobierno que puso sus ojos en los productores fue Ricardo Maduro al liberarnos de la carga de impuestos e intereses que nos mantenían en aquel momento agobiados pagando intereses hasta de un 40% en la banca nacional.

¿Se considera una mujer realizada? “A estas alturas de la vida soy una mujer realizada, comencé con 10 manzanas. Actualmente 780 manzanas, produciendo en temporada buena 15 mil quintales. Lamentablemente debido a los altos costes de los insumos y la falta de créditos en la banca nacional no fue posible cultivar todas las fincas. Es una epopeya gigante y quiero volver a producir los 15 mil quintales.

¿Apoyo gubernamental? “Al gobierno no le preocupa el esfuerzo nuestro, pero a mí si me preocupa la situación actual. Hoy nosotros volvemos los ojos al gobierno para mejorar en bien de la economía de todos. Las mujeres merecemos el lugar que la historia nos ha negado, somos el eslabón principal de la economía, de la educación y el desarrollo. Mi llamado respetuoso a la Presidenta, Xiomara Castro Sarmiento, ponga sus ojos en esas miles de mujeres emprendedoras y habrá dejado el mejor de los legados a Honduras.

¿Cómo surge “La Patrona”? Como lo exprese antes, la gente que trabaja conmigo, con ese lenguaje de cariño utilizan esta palabra con respeto y gratitud. “La Patrona” es ahora una marca comercial de prestigio. Es el valor agregado, yo soy productora y mis hijas, prácticamente las creadoras de la marca, logrando el primer premio de la mejor taza de café el 2014. En resumen, yo soy la que produce a mucho orgullo, mis hijas, entraron de lleno a la exportación de los cafés especiales, concluyó.

Roxana Emperatriz Zelaya López, es la ideóloga de los cafés especiales, catadora por excelencia, dinámica, activa. Es el cerebro de todo lo que se mueve en derredor de la empresa. Es pionera en exportaciones a Japón, Australia y Canadá. Afirma que, “hasta el 2014 no creían en el café especial, ahora tenemos un mercado abierto a nivel nacional e internacional. Aquí quien manda es “La Patrona”, y manda con los mejores café, apuntando en la dirección correcta, que, como una de las mujeres emprendedoras y visionarias, supo cruzar el puente de su presente lejano a un futuro que le parecía incierto, expresa.

Juana López Rodríguez, nació el 8 de marzo de 1947. Es maestra de Educación Primaria. Contrajo matrimonio con Godofredo Zelaya (QDDG). Cuatro hijos: Dulce María, Roxana Emperatriz, Milton Gerardo (QDDG), y Lurvin Lorena.