Luis Daniel Fonseca, presidente del Colprosumah: “Refundar no es maquillar el currículum”
En tan poco tiempo, este maestro rural con voz de locutor y porte de defensa central llegó a la presidencia del colegio magisterial más grande y multimillonario del país. Sus detractores lo acusan de recurrir a las turbias maniobras de sus antecesores, otros dicen que es el testaferro de los viejos caudillos, saqueadores de los fondos de los afiliados y, al igual que toda la dirigencia, entregado al gobierno de turno. Sin embargo, él promueve el relevo generacional, la transparencia, rendición de cuentas, beneficios económicos para la base y reformas para acabar con los abusos históricos del continuismo, tráfico de plazas y favores sexuales. Se desmarca, además, de ideologías y aboga por un verdadero modelo educativo.
¿Qué posibilidades hay que este gobierno le cumpla al magisterio?
Hay voluntad política, hemos planteado un reajuste salarial y que se descongelen todos los colaterales desde el 2012, esperamos dinamizar todos estos procesos.
¿No temen que los engañen?
Bueno, estamos con un gobierno amigo, ya nos hizo un reajuste entre 1,500 y 2,220, que es muy significativo comparado a los 12 años de la dictadura cuando lo más que conseguimos fueron mil lempiras.
¿Será posible las 60 rentas?
Mire, ese fue un acto eminentemente político de gobierno anterior, que sin un estudio actuarial se decidió hacer un decreto en un Congreso móvil en Gracias, Lempira, pero también ese mismo decreto dice que será previo al estudio actuarial, así que hay que esperar ese estudio para no arriesgar la estabilidad del Inprema.
¿Esta cercanía con el gobierno no le resta beligerancia?
No, porque tenemos como principio el pluralismo, no le preguntamos el partido político al afiliado, cuando le llamamos amigo es porque ha vuelto los ojos al magisterio, no al color político que ahora está en el gobierno.
¿No tendría problemas de llamar a una huelga si no se les cumple?
Como Colprosumah siempre hemos manifestado que vamos estar a la par de la sociedad, por eso nuestro lema es que “nacimos en la lucha, viviremos en la lucha en defensa de los sagrados intereses del magisterio y de la sociedad”.
¿Qué criterio le merecen las políticas educativas?
Con aciertos y desaciertos. Aciertos en cobertura, reparación de centros educativos, merienda escolar, cero días de huelga, pero con un gran desacierto en no poder construir un nuevo modelo educativo que responda a las grandes necesidades de la nación. La Secretaría se ha dedicado a maquillar el currículum, sabiendo que la educación es la base del desarrollo. Estamos esperando esa gran refundación educativa que se anunció, no se trata de maquillar el currículum sino llegar al fondo de un nuevo modelo.
¿Qué tan grave es la deserción escolar?
Es una realidad, más de un millón de niños que se retiraron de la escuela porque necesitan trabajar o emigraron por la pobreza, por eso es necesario mejorar las políticas públicas para poder regresar esos niños a las aulas.
¿Es usted activista de Libre?
Yo soy un ciudadano defensor de la educación pública como un principio universal, no me identifico con ningún partido político porque la bandera número uno es la defensa de la educación pública.
¿Comunista?
La única ideología que tengo es la mejora continua de la educación pública porque ahí estudian los hijos de los más pobres y por eso buscamos tener propuestas que vengan a cambiar esas condiciones de pobreza y eso no lo va hacer ningún partido político sino las voluntades de todos los sectores.
¿Cuándo ingresó al sistema?
En 2006.
¿Por qué tan tarde?
Después de terminar la licenciatura, mis padres se habían involucrado en la compra y venta de ganado y me fui a trabajar con ellos, no pensaba ejercer por lo complicado, concursaba, pero había que andar buscando al padrino político, hasta que se me dio la oportunidad por méritos.
Debe tener un buen padrino para ser presidente del colegio más grande del país en tan poco tiempo.
Siempre me han dicho ‘te puso fulano’, pero mi único padrino es el afiliado y un buen equipo de trabajo con transparencia y rendición de cuentas, una nueva generación de líderes que creen en el relevo generacional.
¿Es su reelección ilegal, como lo acusan sus detractores?
No. Estoy en el cargo con la ley del 97, que permite la reelección continua y volver a postularse después de un período alterno. Así se eligieron los que ahora me acusan. Más bien nosotros proponemos una reforma de solo dos periodos y prohibir que los directivos no pasen a dirigir el Fondo y la Fundación, que son salarios hasta de 55 mil lempiras, como lo venían haciendo a los que sacamos. Nos parece una pesada carga para la base. La reforma está parada en el Congreso Nacional, pero yo creo en los relevos generacionales y por eso vamos a insistir en la reforma.
¿Qué otros excesos halló aquí?
Bueno, en su momento se van a turnar a las instancias correspondientes, se acaba de terminar una auditoría externa para que nuestro próximo congreso, el 9 de diciembre en Tela, tome las decisiones respectivas.
¿Malversación de fondos, tráfico de plazas, favores sexuales. Qué más?
No quiero dar detalles, pero tampoco vamos a descartar que de repente hubo tráfico de influencias, no me consta, el detalle es que el compañero ha perdido la cultura de la denuncia y nosotros queremos devolver esos espacios, nuestros equipos legales están listos para impugnar nombramientos ilegales, pero ocupamos la denuncia, acto de presencia y la documentación.
¿Cuánto cuestan los activos del Colprosumah?
No puedo dar públicamente esa información sin autorización del congreso, pero cualquier afiliado puede pedirla. Lo que le puedo decir es que estamos manejando con transparencia cada centavo de nuestros afiliados.
¿Cuánto es la membresía?
Somos 91 mil afiliados y todos los años el 80 por ciento de los nuevos egresados nos buscan por credibilidad. Somos el colegio más grande del país y de Centroamérica y el tercero del continente.
¿Cuáles son los logros en su gestión?
El principal, digo yo, ha sido apoyar a unos tres mil agremiados con su diplomado universitario, además de préstamos rápidos de hasta 250 mil lempiras y tenemos una unidad de emprendimiento de 250 mil a 12 por ciento y otra línea de cero mora del cinco por ciento.
¿Al dejar el cargo va a volver al aula de clase o saltará a la política, como otros dirigentes?
Luis Daniel Fonseca vuelve a su centro educativo Rafael Heliodoro Valle, de la aldea Linaca, Danlí, donde siempre he estado desde hace 16 años. Nunca me he movido a pesar que he estado en cargos de junta de selección donde se pueden hacer y no pienso moverme.
¿Cuál es su salario?
Mi salario de docente es de 18 mil lempiras por mis 36 horas que tengo y un plus como dirigente de 20 mil lempiras, ese es mi ingreso, no tengo nada más.
¿Se sometería a una auditoría?
Estamos abiertos, yo mismo pedí una auditoría forense en las cinco seccionales más grandes y para sorpresa los dirigentes de la Seccional Número 1 de Tegucigalpa, que son los que atacan y más gritan, no quieren, presentaron documentación incompleta.
Como originario de la tierra del maíz, ¿puede sembrar?
No le puedo decir que tengo gran expertis como mi padre, pero tenemos los callos del machete y el azadón (enseña las manos).
Tiene pinta de defensa central. ¿Jugó?
Era lateral derecho pero una lesión en la rodilla me sacó de las canchas y no me operé por temor. También jugué voleibol.
ÉL ES….
Luis Daniel Fonseca nació en Danlí, El Paraíso, el 29 de noviembre de 1978. Hizo estudios secundarios en el Instituto Departamental (IDO) y se graduó de Maestro de Educación Primaria en la Escuela Normal Mixta Pedro Nufio y posteriormente obtuvo una licenciatura en Pedagogía y una maestría en Formación de Docentes en la UPNFM. Es maestro del Centro Básico Rafael Helodioro Valle de aldea Linaca, Danlí. En octubre fue electo para un segundo período en el Colegio Profesional Superación Magisterial Hondureño (Colprosumah).
